Alto Directivo. Han sido meses de anuncios y presentaciones. El CES de Las Vegas, el MWC de Barcelona, el E3 de Los Angeles, la IFA de Barcelona... Microsoft ha visitado todas estas ferias con su nuevo ecosistema, que afecta a Windows Phone 8, Windows Server o Xbox 360, pero que tiene a Windows 8 como piedra angular. Una misma interfaz y muchos programas que "hablan" los unos con los otros, además de la entrada de la compañía en el desarrollo de su propio 'hardware', con el objetivo de liderar el sector.
Microsoft necesita reorientar su negocio, ya que el PC no vive su mejor momento. Los consumidores y el sector empresarial comienzan a migrar a una nueva generación de dispositivos, servicios y contenidos de entretenimiento basados en la nube. Nada más gráfico que los resultados anunciados por el gigante de Redmond el pasado 18 de octubre de 2012: sus beneficios cayeron un 22 por ciento en el trimestre junio-septiembre, principalmente por la desaceleración de ventas de ordenadores.
Eso nos lleva al 25 de octubre y a Nueva York. Esa fecha y esa ciudad han sido las elegidas por Microsoft para presentar la versión definitiva, tan solo un día antes de su lanzamiento, de su nuevo sistema operativo, pensado tanto para sobremesa como para dispositivos móviles, y su 'tablet' Surface. Durante estos días, también se están actualizando las Xbox 360 de todo el mundo y Windows Phone 8 se presentará el 29 de octubre en San Francisco, donde se espera que se anuncien las fechas de lanzamiento de los primeros dispositivos de HTC, Samsung y Nokia.
Con el lanzamiento de su nuevo sistema operativo, la nueva versión del 'dashboard' de la consola y la actualización de Windows Phone, Microsoft va a echar el resto con los contenidos digitales multiplataforma. Xbox será la marca que abandere dicha "revolución". La compañía ha lanzado Xbox Music y Xbox Video, plataformas de descarga, alojamiento en la nube y 'streaming' de canciones, películas y vídeo que faciliten el consumo a los usuarios.
Además, ha desarrollado SmartGlass, una plataforma que cuenta con aplicaciones en cada dispositivo, tenga el sistema operativo de Microsoft que tenga, que permite que "hablen" entre ellos. Si un usuario está viendo una película en Xbox, puede ver información relacionada en el 'tablet' de forma automática; si juega con un videojuego, puede usar su móvil como mando extra o para consultar mapas, por ejemplo. La compañía promete que con SmartGlass y el entretenimiento Xbox por fin romperá las barreras de consumo entre dispositivos y llevará la experiencia a un nuevo nivel. Para lograrlo, además de confiar en sus propio ecosistema, lanzará aplicaciones para otros sistemas operativos móviles a lo largo de 2013.
Al margen de la apuesta por los contenidos, Windows 8 y su propuesta táctil en dos versiones es clave para Microsoft, puesto que supone revitalizar su negocio. Bill Gates ha dicho esta semana que el nuevo Windows "no es únicamente una nueva versión más" del sistema operativo, sino un "producto absolutamente fundamental" tanto para Microsoft como para la industria en general. "Introduce a Windows en el mundo de los dispositivos táctiles de baja potencia", ha dicho el fundador de la compañía, ahora retirado de la dirección de la misma.