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Nos ha pillado con el paso cambiado, no lo esperábamos … y, de pronto, hay que reorganizar todo para trabajar en un nuevo escenario.

De repente, un montón de preguntas:

• ¿Cómo organizo a la gente?
• ¿Cómo distribuyo tareas?
• ¿Cómo estimo cargas de trabajo?
• ¿Qué indicadores de avance tengo?
• ¿Cómo mantengo cohesionado al equipo?
• ¿Cómo aseguro el correcto flujo de información?
•  ¿Cómo promuevo la cooperación en los distintos proyectos?

Si bien lo miras, estas preguntas no son muy distintas a las que se platean con cualquier equipo que trabaja disperso y, en el fondo, con cualquier equipo, tenga la configuración o la ubicación que tenga.

Este excepcional momento de confinamiento, ha evidenciado muchas de las grandes cualidades de nuestros equipos: su capacidad de adaptación, su compromiso, su iniciativa, su incorporación de nuevos aprendizajes, sobre todo digitales, su voluntad de alcanzar los resultados.

Y, por otro lado, quizá ha hecho patentes algunas mejoras que teníamos pendientes en la organización de nuestro trabajo y “visualiza” la necesidad de impulsar nuestra dinámica de colaboración cuando trabajamos en remoto.

Por si te puede ayudar, desde Auren BLC te ofrecemos una pequeña píldora con pautas concretas para gestionar tus equipos remotos. Quizá, ahora que estamos separados, sea una buena oportunidad para trabajar mejor juntos.

Haz click en la infografía para acceder a la píldora.

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