CEPYME apunta que las empresas españolas afrontan un escenario preocupante de restricción de crédito en los próximos meses, especialmente dada la situación en la que se encuentran las empresas tras la pandemia
AltoDirectivo
Para Jordi Solé Tuyá, socio y director ejecutivo de Kreedit, ''es normal que en el primer semestre de 2021 el crédito a pymes haya caído respecto al mismo período del año anterior, puesto que en el año anterior la concesión de crédito fue elevadísima".
Las pymes están en alerta. Según datos publicados por la Confederación de la Pequeña y Mediana Empresa (CEPYME), durante el primer semestre de 2020, se ofrecieron un total de 146.860€ millones en créditos a pequeñas y medianas empresas, lo que supone un 38% menos que durante el mismo periodo de 2020.
Para Tuyá, estos datos eran de esperar, "puesto que en el año anterior la concesión de crédito fue elevadísima como consecuencia de los préstamos ICO. Los bancos no aprecian capacidad de devolución y, por tanto, no están predispuestos a conceder nuevo crédito ante un escenario de incremento de los impagos''.
CEPYME advierte que la restricción del crédito dificultará la recuperación de las empresas, tanto la parte de la estructura empresarial más afectada por las restricciones, como el declive de la actividad empresarial.
En la actualidad, la necesidad de créditos por una parte del sector de las PYMES, viene de la mano de la gran mochila de deuda que acumulan durante los casi dos años de pandemia. Solé, añade que ''el nuevo crédito que en estos momentos piden las pymes no es para financiar el circulante, ni inversiones, sino que es para cubrir las pérdidas provocadas por la pandemia o para repagar los otros préstamos que las empresas ya tienen".
Esta desconfianza que tienen los bancos para ofrecer financiación también es palpable en las propias PYMES. Según apunta Solé, "se ha reducido la demanda de crédito por parte de algunas pymes porque no se atreven a ello, al apreciar todavía mucha incertidumbre".
El futuro de la financiación se espera movido, ya que en unos meses expirará el período de carencia de los préstamos ICO que se facilitaron hace casi 2 años atrás. Ahora, se debería empezar a pagar el capital, pero muchas empresas no van a poder hacerlo por lo que, como apunta Jordi Solé, ''va a ser inevitable que el ICO y los bancos faciliten la incorporación de un tercer año de carencia en los préstamos ICO y, además, que se efectúen quitas masivas que no supongan una ''mancha'' para la empresa que le pueda perjudicar para acceder a nueva financiación más adelante''.
*Si te ha resultado interesante este artículo, te animamos a seguirnos en TWITTER y a suscribirte a nuestra NEWSLETTER DIARIA.
Alto Directivo