Nuestro país cuenta con más de 400 startups Foodtech, siendo una de las mayores potencias del sector a nivel mundial y contando con una inversión de 695 millones de euros
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El sector agroalimentario es uno de los motores de la economía española, concentrando casi el 10% del PIB, pero además tenemos la oportunidad de convertirnos en una potencia mundial en la innovación en el sector, gracias al 'Foodtech', término con el que se conoce a cualquier tecnología aplicada a la cadena de valor agroalimentaria. Y así lo demuestra la edición 2021 del informe sobre el Estado del Foodtech en España, estudio cuantitativo que analiza el sector que ha sido elaborado por segundo año por Eatable Adventures, una de las tres principales aceleradoras de foodtech a nivel global.
El 2021 ha sido un gran año para el ecosistema emprendedor en nuevas tecnologías aplicadas a la alimentación. Pese a las dificultades sufridas por la economía como consecuencia de la COVID-19, se consolida la cifra neta de 407 startups del sector, habiendo nacido el 9% de ellas este año. España se posiciona como una de las principales potencias globales en el sector, similar a Francia, por delante de Reino Unido, pero muy por detrás de las 900 startups de Israel o las 200 de Singapur, territorios mucho más pequeños que nuestro país.
Sin embargo, el hecho más destacable es el importante crecimiento de la inversión recibida por estas startups a lo largo de 2021, que alcanza los 695 millones de Euros, un crecimiento de +220%, más del triple que en 2020. Esta cifra coloca al foodtech como la segunda categoría de inversión en startups en nuestro país, por detrás sólo del transporte. La mayor parte de esta inversión se produce en fases muy tempranas (23% preseed y 46% seed). El 23% se produce en series A y sólo un 5% en fases posteriores o un 2% en adquisiciones. Glovo protagoniza la ronda más elevada, con 450 millones de euros, seguido de Biotech Foods con 36 millones de euros, Heura con 16 millones y Biome Makers y Crowdfaming con 15 millones de euros cada una de ellas.
La preocupación de toda nuestra sociedad por la sostenibilidad, combinada con la creciente demanda de los consumidores por su productos más saludables, ha sido entendida por el sector como grandes oportunidades, aumentando las startups que se centran en el sector primario de la cadena, en la agricultura y ganadería, buscando fórmulas más sostenibles en la producción. Así, el 24% de las startups trabajan en agrifoodtech (vs 17% en 2020), el 35% en producción y transformación, el 24% en distribución y retail, y el 17% en restaurant tech.
De esas startups que trabajan en el sector primario, este año hay un mayor peso en proyectos centrados en la modernización de los cultivos, aplicando software y automatización en los procesos (36%), mientras que se reduce ligeramente el peso de los nuevos métodos de cultivo (18%) o la aplicación de biotecnología en los campos (16%).
Analizando el proceso de alimentos, que sigue siendo el punto de la cadena de valor agroalimentaria que más pesa (35%), hay un cambio en la búsqueda de nuevos ingredientes con los que producir alimentos alternativos (47%), en contra de los alimentos plant-based o a partir de insectos, que era el principal tractor hasta ahora (24%).
En el apartado de logística, se reduce ligeramente el peso de los modelos de venta directa a consumidor (74%) que en 2020 habían ganado un peso muy importante debido al COVID-19. Sin embargo, vemos como muchas de estas startups, que empezaron centradas en la distribución de alimentos cocinados en restaurantes (delivery) están ampliando sus catálogos, para virar hacia el e-grocery.
Por último, en el restaurant tech vemos claramente cómo crecen los proyectos relacionados con la mejora en la gestión gracias a inteligencia artificial y uso de data (40%) mientras que hasta ahora esta categoría estaba liderada por las plataformas de reservas.
Un punto importante del estudio es el que refleja la tecnología empleada en estos proyectos. En 2021 vemos como crece el uso de biotecnología (32,05%), principalmente en el procesamiento de alimentos y mejora de cultivos, pero también de Inteligencia Artificial (28,21%) y Machine Learning (24,36%), en este caso de una manera mucho más transversal pues tienen aplicaciones en prácticamente todos los puntos de la cadena de valor. La robótica (12,82%) y el Blockchain (6,41%) tienen un uso menor en el volumen de proyectos analizados, por tener una menor versatilidad y ser tecnologías más específicas pero vemos como hay crecimiento respecto al informe de 2020, confirmándose su consolidación como tecnologías base del foodtech.
El estudio recoge además una dimensión cualitativa que busca ser un reflejo de las asignaturas pendientes del sector. Según esto, los emprendedores declaran la importancia de los centros de investigación en el desarrollo de startups en el sector (89% en 2021 vs 65% en 2020), aunque se percibe que las universidades no cumplen este papel, aunque esto ha mejorado ligeramente (50% en 2021 vs 61% en 2020).
Se atribuye al conocimiento del sector por parte de los inversores internacionales como motivo por el que invierten en él (88% en 2021 vs 85% en 2020), que contrasta con el sentimiento de que el inversor nacional carece de este conocimiento, aunque esto ha mejorado en este año (41% en 2021 vs 63% en 2020). Es importante destacar cómo se refleja en los datos el cambio que está viviendo la industria alimentaria y se percibe cómo apoyan al desarrollo de startups (67% en 2021 vs 43% en 2020).
Y sigue quedando pendiente, aunque haya mejorado, el punto de las subvenciones. Los emprendedores siguen reclamando mayor facilidad para acceder a ayudas públicas específicas para el sector (53% en 2021 declara que esto es un problema vs 72% en 2020).
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