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La irrupción del COVID-19 ha supuesto un auténtico antes y después en el mundo empresarial. La crisis sanitaria ha trastocado nuestros hábitos y transformado las estrategias de marketing de las distintas marcas y negocios, favoreciendo un importante cambio en la forma en que piensan, se diversifican e interactúan con los consumidores.

En este particular contexto, marcado por la imparable transformación digital, es indispensable que las empresas tengan una fuerte presencia en Internet, ya que como se desprende del 'Estudio anual de Redes Social 2021', de IAB Spain, un 85% de los internautas de entre 16 y 70 años utilizan las redes sociales, lo que representa más de 26,6 millones usuarios españoles.

De igual forma, según la IV edición del estudio sobre el estado de Digitalización de las Empresas y Administraciones Públicas españolas del Observatorio Vodafone de la Empresa, el interés por captar nuevos clientes crece. Y, en este aspecto, la digitalización puede ayudar mucho a las pequeñas y medianas empresas, que les permite contactar de forma más directa con los clientes, abrir nuevos mercados y conocer mejor los hábitos y necesidades de los usuarios. Esta preocupación por adaptarse a las nuevas tecnologías se traduce en un aumento de la inversión en relación a años anteriores y en una apuesta por introducir nuevas herramientas digitales.

De hecho, el 95% de las pymes utiliza las redes sociales en su negocio. La atención y la relación con los clientes (47%) es el uso más frecuente que realizan. Además, el 25% de los usuarios les inspira confianza que las marcas tengan perfil en redes. Mientras que el 66% valoran positivamente los comentarios de las marcas en las redes.

Como explica María Ramírez, especialista en marketing digital y gestión de redes sociales: ''No importa qué tan pequeña sea el negocio, siempre tendrá más oportunidades si hace una comunidad que interactúa con sus publicaciones porque comparte intereses afines, lo que incide favorablemente en la prospección y posterior fidelización de clientes, además de incrementar el valor de la marca''.

Estar o no estar en redes sociales ya no es una opción para las pymes españolas. Tras la irrupción de la pandemia, estar ajeno de este importante escaparate significa tener menos posibilidades de conectar con los potenciales clientes, y por ende menos oportunidades de vender. No hay diferencias entre sectores. Todas las empresas necesitan dar el salto digital a un entorno que fomenta no solo el conseguir usuarios sino la buena interlocución con los clientes, algo imprescindible en la imagen de marca.

Por ello, lo primero que debe hacer una pyme, según María Ramírez, experta en marketing digital y gestión de redes sociales, es analizar cómo es su cliente y qué redes usa más. Después, hay que analizar los recursos y el tiempo disponible para su gestión porque deben estar actualizadas y, sobre todo, debe haber tiempo para responder comentarios y generar conversación. ''Las redes son bidireccionales y tienen que ser entendidas como tal'', explica Ramírez.

Esta experta cree que, en general, las pymes son cada vez más activas en las redes, pero coincide en que el problema es que tienen presencia en más de las que resultan necesarias. ''Muchas creo que deberían cerrar y quedarse con aquellas en las que pueden aportar valor'', porque, aunque el uso de redes por parte de las pymes sea ''masivo'', eso no quiere decir que ''se estén usando bien''.

Otro error muy común entre estas empresas, asegura Ramírez, es abrirse un perfil, actualizarlo durante un tiempo y reducir el ritmo de publicación a las pocas semanas, olvidando que deben tener una actualización periódica para generar el impacto esperado, ya que no solo funcionan como un espacio de ventas, sino que también refuerzan la imagen de marca del negocio y sirven para llevar tráfico a la web de la página, ''favoreciendo su posicionamiento orgánico''.

Y es que una de las principales ventajas que tienen las pymes a la hora de usar las redes es el alcance que pueden conseguir con poca inversión. Es decir, plataformas como Facebook, Instagram o Tiktok dan un alcance e impacto que antes solo se conseguía con la televisión, salvando los gastos de inversión previos que había que hacer. ''La inversión requerida para salir en televisión era alta, pero con redes puedes conseguir el mismo impacto pagando 20 o 30 euros'', explica la especialista. Como avisa, tampoco es suficiente para una pequeña y mediana empresa basar su estrategia en redes sociales en hacer publicaciones, sino que se debe trabajar también la parte publicitaria. ''Si quiero impactar y captar nuevos clientes debo inyectar una pequeña cantidad en publicidad dentro de la red social'', argumenta.

Otra de las claves para rentabilizar las redes es una buena atención al cliente. Como afirma María Ramírez, las redes son una oportunidad de tener una conversación con los usuarios, ''desde recomendaciones que podamos darles a poder escucharlos cuando tienen un problema con nuestros productos''. Todo suma, por lo que cuando un cliente demanda una cuestión por alguna red social, la empresa, teniendo en cuenta que se está hablando como marca, debe dar, a juicio de Ramírez, respuestas inmediatas.

En la comunicación con los clientes en las redes sociales es fundamental también tener en cuenta siempre los valores de la marca, sea cual sea la plataforma en la que se trabaje. Es necesario tener una buena comunicación y un buen mensaje siempre ayuda, al igual que se prima el hecho de hacer una campaña diferenciada en un determinado canal. Son estrategias pendientes para que las pymes puedan por fin afinar la voz en las redes.

6 ventajas de las redes sociales para pymes

María Ramírez, especialista en Marketing Digital y redes sociales nos da algunas claves sobre los múltiples beneficios de las redes sociales para los negocios:

Recoge las necesidades del cliente

Como indica María Ramírez, la crítica, si es constructiva siempre ayudará a mejorar. Los distintos tipos de redes sociales son una herramienta increíble para comunicarnos con nuestros usuarios. Quienes nos felicitarán, nos criticarán o nos darán sugerencias…

Mejora nuestro posicionamiento SEO

Estar presente en redes sociales ayudará de forma positiva al posicionamiento web de nuestra página.

Nos diferencia

Ser innovador puede ser una estrategia para que te diferencies de tus competidores. «Analizar a la competencia con la intención de identificar buenas prácticas que podrían significar oportunidades para tu marca. Así, estaremos al día de sus movimientos y sabremos más fácilmente cómo diferenciarnos», concluye Ramírez..

Aportan valor

El contenido debe ser relevante para la comunidad a la que te diriges, evita el contenido de relleno, genérico, que no aporta valor a tus seguidores. «Es importante, en la medida de lo posible, cumplir con la regla del 80/20: 80% del contenido que sea sobre temas de interés para la comunidad que gestionas y sólo un 20% para promocionar la marca, tus productos o servicios», explica María Ramírez.

Atraen tráfico a nuestra página web y permiten hacer publicidad a bajo coste

Si tu perfil es interesante, llamas la atención y tarde o temprano se convertirá en la puerta de entrada a tu web. Así mismo, la mayoría de las redes sociales permiten hacer publicidad con unos presupuestos se adaptan a cualquier escenario y bolsillo por lo que además podemos difundir nuestra marca y diseñar estrategias de marketing en redes.

Sirven como canal de ventas

Con la incorporación de herramientas de e-commerce en las redes sociales ahora es posible realizar ventas y pagos dentro de la misma plataforma sin que los clientes tengan que ser redirigidos a otro sitio web.

Sin duda, las redes sociales son un escaparate para las marcas pequeñas, dentro de la gran oferta de posibilidades que Internet ofrece para hacer negocios. Aprovechar sus ventajas está en manos de cada uno. 

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