Alto Directivo. Un estudiante de Minnesota (Estados Unidos), con el apoyo de la Unión Americana de Libertades Civiles, ha demandado a su colegio público debido a que empleados de la escuela realizaron búsquedas en su Facebook y en sus cuentas de correo electronónico.
La CNN informa de que la estudiante de 12 años de edad, identificada como R.S., fue en dos ocasiones castigada por las declaraciones que hizo en su cuenta de Facebook, y también fue presionada para revelar su contraseña a los funcionarios escolares.
Según su defensa, "R.S. fue intimidada, asustada y humillada", y tuvo fue retenida en una pequeña sala mientras que veía cómo tres empleados indagaban en sus mensajes privados.
La demanda alega que sus derechos de la Primera Enmienda de la Constitución de los Estados Unidos fueron violados por los empleados del Minnewaska Area Middle School, así como sus derechos con respecto a la Cuarta Enmienda de búsqueda e incautación irrazonable.
El colegio niega las acusaciones y según un comunicado que ha realizado, asegura que no ha violado ningún derecho civil tal como dice la demandante.
SE SENTÍA ATACADA
Según la denuncia, R.S. consideró que uno de los empleados de la escuela se metía con ella, por lo que escribió en su muro de Facebook que odiaba a esa persona porque era muy cruel. El mensaje no fue publicado en el recinto escolar ni usando equipos o conexiones de la escuela, dice la demanda.
De alguna manera, el director de la escuela consiguió una captura de pantalla del mensaje, castigó a R.S. y le hizo pedir disculpas al empleado de su escuela.
Poco después, la alumna volvió a hacer otra publicación en Facebook sobre el colegio. Esto provocó que la niña fuera suspendida de la escuela temporalmente y consecuentemente se perdiera un viaje de esquí con el colegio.
Finalmente tuvo lugar un tercer incidente, debido según la denuncia a que R.S. fue llamada por responsables de la escuela porque otro alumno dijo en el colegio que la demandante había tenido una conversación sobre sexo en Facebook.
Entonces tuve que reunirse con distintas autoridades locales, y según la demanda le intimidaron para que revelase a su nombre de usuario y contraseña de Facebook.
En este sentido, ni la escuela ni las autoridades tenían algún tipo de permiso por parte de la madre de R.S. para ver sus mensajes privados. Además la niña pasó algunos momentos incómodos relativos al material que descubrieron, dice la demanda.